21 de Septiembre de 2018

La unión de las cooperativas sociales

Una red congrega a más de veinte entidades de todo el país.

Sumar inclusión social y trabajo cooperativo: así fue el origen de la Red de Cooperativas Sociales.

Corría enero de 2017 cuando, de a una, fueron entrelazándose experiencias que abordaban problemáticas vinculadas con la salud mental, adicciones, discapacidades; y también otras que vislumbraban los efectos que genera la situación de calle. “Pensamos que era  necesario crear un espacio que las reuniera”, rememora Mariana Pacheco, de La Huella, cooperativa que forma parte de ese entramado y que se desarrolla en el Hospital Borda combinando la salud comunitaria y la inclusión. Y sigue: “Con Hugo Cabrera, el presidente de la Federación de Cooperativas Autogestionadas de Buenos Aires, fuimos a la Confederación Nacional de Cooperativas de Trabajo a presentar a la cooperativa La Huella y a hablar de las cooperativas sociales. En conjunto pensamos en la necesidad de reunirlas para que las poblaciones que por su condición de vulnerabilidad no tienen posibilidades de incluirse en el mercado laboral, puedan hacerlo”.

 

Inspiración

El espacio tomó la experiencia de UNISOL Brasil, asociación civil sin fines de lucro que defiende los intereses de la clase obrera y apuesta a la mejora de las condiciones de vida y de trabajo de las personas, y la replicó en nuestro país. «Ha sido una inspiración y aprendemos de su experiencia», señalan desde la red.

Con el acompañamiento de las universidades públicas de Quilmes y de Tres Febrero, de confederaciones y federaciones cooperativas, y de organizaciones no gubernamentales; las entidades que hoy integran la red son: La Huella, Duchas del Sagrado, Soy Vos, Mayma Taller, Semilla, Remade, Entrevero, los emprendimientos Emilianas y Vital, Molineros del Borda, Luthiers del Borda, el taller socioproductivo Orillando la vida, Maquinando sueños, Bellísimas, Quereme así piantao, Una Movida de Locos, Sembrando Sueños, Sal y pimienta, Somos y Hecho en Buenos Aires, entre otros.

«Los Estados no han dado aún respuestas satisfactorias a las problemáticas de las personas con derechos vulnerados –afirman desde la red–. Sí lo hace la economía social y el cooperativismo, al generar inclusión e integración a través del encuentro, el acompañamiento y el desarrollo de un proyecto socio-productivo que contenga la diversidad».

 

Texto: Jesica Farías 

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